¿Quién es capaz de resistirse a unos Magnum de chocolate blanco? ¿Y aún más cuando el relleno es un cremoso yogur natural, con una capa de crema de cacahuete saludable y un corazón de mermelada de fresa? Sí, lo sé, suena delicioso. Así de increíble es la receta de hoy de helado tipo Magnum casero.
Seguid leyendo la receta porque os vais a enamorar, sobretodo cuando veáis los pocos ingredientes que necesitáis y lo fáciles que son de preparar. Son un pecado totalmente atemporal, ya que se puede preparar todo el año y disfrutar de un caprichito siempre que lo deseemos.
Como os decía arriba, el relleno lo voy a hacer con yogur natural, pero podéis jugar con otros ingredientes para hacerlos más cremosos o darles otro toque. En la lista de ingredientes os dejo las varias opciones, pero básicamente se trata de usar queso Mascarpone o nata para montar. Os comento también que yo he utilizado un pelín de azúcar de coco y miel para endulzar el yogur, creo que más no es necesario ya que la mermelada y el chocolate blanco ya le dan el extra de dulzor, pero sin problema podéis utilizar en la mezcla cualquier endulzante que os guste y en la cantidad que deseéis. SI seguís la receta sin las modificaciones que os propongo, estos helados son bastante saludables. El único ingrediente menos «healthy» es el chocolate blanco, pero podéis hacerlo casero o buscar opción sin azúcar. También podéis cambiar la cobertura por chocolate negro +80% y quedará súper rico también.
Veréis que necesitaréis bastante cantidad de chocolate, pero eso es porque tenemos que sumergir los helados en una buena cantidad de chocolate, pero es muy probable que luego os sobre. Lo podéis poner en un molde alargado o un molde tipo de turrón y dejar que vuelva a enfriar para reutilizarlo. Ah, y para darles forma, podéis utilizar cualquier tipo de molde, pero mi recomendación es que uséis un molde de silicona para helados, porque será mucho más fácil desmoldarlos y que quede la clásica forma de Magnum. Yo utilizo estos moldes de polos apilables de Lékué (también están en versión mini), pero estos también están muy bien.
Este Magnum casero os trasladará directamente al verano más auténtico y saludable. Es un helado con nombre propio, cuando decimos «Magnum» todos sabemos de qué hablamos, y realmente se ha convertido en un imprescindible de los veranos, qué placer disfrutar de este crujiente de chocolate exterior y la cremosidad interna.
Ah! Y no os perdáis otras recetas de helados deliciosos en el blog!!!
Tiempo total: 30 min + 6 horas enfriado (mínimo)
Raciones: 4 helados
Dificultad: Fácil
Ingredientes:
- 375 gr yogur natural (3 yogures aprox)
- Opción 1: 330 gr yogur + 45 gr nata
- Opción 2: 150 gr yogur + 40 gr nata + 180 gr Mascarpone
- Opción 3: 190 gr yogur + 180 gr Mascarpone
- Opción 4: 190 gr nata + 180 gr Mascarpone
- 1 cda azúcar de coco o panela
- 1 cdita miel
- 4 cdas mermelada de fresa
- 40 gr crema cacahuete (aprox)
- 230 gr chocolate blanco
- 1 cda aceite coco
- Toppings opcionales: bolitas de proteína crujiente recubiertas de chocolate y peanut cocoa, ambos de My Body Genius
Elaboración:
Paso 1:
Para la versión que he hecho yo y que podéis ver en las fotos, lo que haremos es poner los yogures en un bol y mezclarlos con una espátula o unas varillas un par de minutos, para volverlos más cremosos. Luego agregaremos el azúcar de coco o panela y la miel y volveremos a mezclar unos segundos para combinar.
Para el resto de opciones el proceso será el mismo, pero con la única diferencia que si utilizamos nata os recomiendo antes que la montéis un poco, no a punto de nata montada, dejándola a medio montar, pero que coja cuerpo, ya que eso nos dará mucha cremosidad en el helado.
Paso 2:
Rellenaremos, con la mezcla anterior, la mitad de los moldes. Introduciremos el palillo y en el centro de cada molde pondremos 1 cda de mermelada, repartiéndola a lo largo por todo el molde. Luego cubriremos con más mezcla de yogur hasta el borde. Taparemos con la tapa del molde o un film y lo llevaremos al congelador un mínimo de 6 horas o toda la noche.
Paso 3:
Cuando ya haya pasado el tiempo de enfriado, pondremos el chocolate blanco y la cucharada de aceite de coco en un bol. Lo derretiremos en el microondas, en tandas de 10 seg. Es importante hacerlo así y mezclando entre cada tanda, porque el chocolate blanco tiene tendencia a quemarse muy rápido. Cuando lo tengamos bien derretido, lo verteremos en un vaso alto y ancho.
Paso 4:
Sacaremos los helados del congelador y los sacaremos del molde. Los pondremos sobre un plato o un papel vegetal y pondremos 10 gr de crema de cacahuete sobre cada helado (repartirlo de forma equilibrada), cubriendo toda la superficie. Lo llevaremos de nuevo al congelador unos 10 min, para que endurezca la crema de cacahuete.
Paso 5:
Después del reposo de 10 min, sacaremos de nuevo los helados y los sumergiremos en el vaso de chocolate hasta llegar al palillo y cubrir todo el helado. Dejaremos unos segundos boca abajo para que suelte el sobrante y veremos como rápidamente endurecerá. Los iremos colocando sobre un plato o papel vegetal y pondremos las decoraciones deseadas (totalmente opcional). Rápidamente pondremos las bolitas, para que se peguen. Una vez hayamos cubierto todos los helados, con una cuchara o manga pastelera repartiremos a tiras un poco de la crema de cacahuete con cacao.
Y ya los podemos devorar. Si no los consumimos todos en el momento, los conservaremos en un recipiente hermético en el congelador.
